EN TORNO A LA NECESIDAD DE INTEGRAR UN BLOQUE REGIONAL DEL NORTE ENTRERRIANO Y SUR CORRENTINO.-

Dr. CLAUDIO FABIÁN GARCÍA (*)

15-02-2019

                                                              OPINION

    Antes de abordar derechamente el tema que motiva este modesto ensayo se nos ocurre pertinente agradecer la gentileza de este medio que me ha permitido poder compartir con todos Uds. y poder reflexionar juntos. También, agradezco por adelantado todos los aportes y sugerencias que nos puedan formalizar.-

    Sirvan estas pocas líneas, para llamar la atención de una construcción colectiva, que todavía no se ha dado a pesar de que hace muchos años que venimos hablando sobre el particular. Ocupándonos de algunos aspectos político  y social de la integración del norte entrerriano y sur correntino como un acto de decisión política  del hombre desde la participación social y política, vale decir, tomar parte activa en las decisiones gubernativas.-

    La perspectiva debe trascender lo meramente local y pasar a otros planos o niveles de análisis que nos lleve a ampliar el zoom de nuestro enfoque en lo político, cultural, social y económico que se debe articular en función del desarrollo humano de los respectivos pueblos.-

    En la búsqueda ansiosa y acuciante del bien común, nos hace pensar en la integración regional como una fórmula que posibilite la obtención de ese progreso, o al menos, de colocar en vías de procurarlo en un plazo más o menos razonable, atento lo perentorio de las cifras que están midiendo ya la dimensión de la miseria, de la ignorancia y de la enfermedad en todos nuestros pueblos, que cada vez están más aislados y marginados, etc. de las decisiones políticas institucionales de nuestras provincias.-

    El norte entrerriano y sur correntino se ha achicado por medio del progreso de la tecnología y los sistemas de comunicación, esto representa una ventaja invalorable que debemos saber aprovechar. Además, transitamos como irreversible pasar a formas de sociedades planificadas mediante un Plan Maestro que sea estratégico e inteligente, con una planificación participativa y democrática que posibilite el desarrollo humano sostenido de nuestras ciudades con una concreta integración regional.-

    Con la ayuda de la geopolítica y de la geoestratégica y con un lente pluridisciplinario que abarque la ciencias políticas, la economía, la geografía, la antropología,  historia y la filosofía, etc., podremos marchar por un rumbo acorde al siglo XXI.-

    Todavía no se tiene conformada la región, solo tenemos una idea que se debe afinar en una apuesta asociativa de todos los actores involucrados, pero es cuestión de empezar a conversar con los pueblos vecinos con los que tenemos que relacionarnos, asociarnos, cooperar, colaborar y fundamentalmente establecer bases  solidarias en el bloque regional a pesar de nuestras asimetrías. Luego trabajar en el proyecto de ley para la formalidad en lo político-institucional.-

    La verdad que no se ha tomado conciencia de lo que representaría para la región este bloque regional actuando para sostener la supervivencia, la defensa en general de los intereses de nuestras ciudades en forma conjunta y no individual, como también para anticiparse y orientar a las decisiones del poder provincial y nacional. De este modo se tendrá mayor peso para exigir con fuerza que las ciudades grandes no se lleven todos los recursos presupuestarios: provinciales y nacionales, por carecer de una mirada globalizada y amplia que proponemos, sin perjuicio de un análisis estratificado de cada plano.-

    En este sentido, nuestros legisladores provinciales  y nacionales, salvo honradas excepciones, siempre estuvieron con las manos levantadas para votar cuestiones centrales que afectan y perjudican nuestros intereses.-   

    Se torna imprescindible unificar en primer lugar, una estrategia que exhiba un panorama común, saberes, inteligencias, perspectivas, etc. como así también la necesidad de acercar la Universidad a la región para que nuestros jóvenes puedan estudiar carreras universitarias, realizar obras conjuntas o pensadas regionalmente en beneficio común, unificar recursos, conocimientos e información que por su trascendencia no admite discusión y controversia, trabajar en relación al aprovechamiento hidroeléctrico de Salto Grande y el Complejo Hidroeléctrico Yacyratá-Apipe, con el fin de cumplir los objetivos fundacionales y conducir al desarrollo de dichas provincias en forma conjunta para la región, a un costo mucho más bajo, para mejorar e integrar la producción, etc.; mejorar las redes viales como las rutas provinciales y nacionales que nos comunican, realizar fiestas regionales consensuadas, promoción y difusión de las mismas, lograr medios regionales que nos comuniquen, turismo, recursos naturales y fundamentalmente una agenda común de actividades con objetivos generales y especiales a cumplir en la modernización de nuestras sociedades.-

    Rescato un hecho sumamente positivo, que  frente a la crisis de la integración y pese a todos, las comunidades no renuncian ni bajan los brazos a su crecimiento y desarrollo. Así las cosas, es hora de nuevas expectativas, de lucha por nuestros derechos, la necesidad de que existan nuevas fuerzas sociales, la incorporación de nuevas técnicas y el acceso a nuevas filosofías, que seguramente movilizará nuevas energías que no caben en los moldes actuales y obsoletos, buscando otro nivel de convivencia y existencia.-

    Esto se observa muy claramente en la política donde se aprecia la caducidad de lo tradicional y la necesidad de la incorporación de lo nuevo, esta es la tarea enorme que tenemos como desafío para el futuro.-

    A guisa de conclusión final de estas reflexiones, que aspiran sólo a constituir una simple aproximación al tema propuesto, como un borrador de trabajo que se puede mejorar con la participación de todos nosotros en el diálogo y en consenso y con una información educativa como articulación de los fines propuestos.-

    (*) Por Dr. Claudio Fabián García –abogado-.-

   

Comentarios