Junto al gobernador Gustavo Bordet los intendentes justicialistas de toda la provincia alertaron sobre las graves consecuencias de las medidas inconsultas que el gobierno nacional tomó en la última semana por tres meses y con fines netamente electoralistas. Sabemos de la dudosa efectividad que pueden llegar a tener estos anuncios que no hacen más que quitarle aún más recursos a las provincias y los municipios de los que ya han venido resignando.
El 58 por ciento del costo fiscal de la modificación del Impuesto a las Ganancias y la eliminación del IVA en algunos rubros (que son coparticipables) lo asumen los gobiernos provinciales. Para Entre Ríos significa una pérdida de 1600 millones de pesos, lo cual repercute en cada uno de nuestros municipios y, por lo tanto, en cada vecino.
Son los entrerrianos, ya bastante afectados por el modelo económico del gobierno nacional, quienes terminan soportando sobre sus espaldas el costo de estas medidas que toma a los fines de recomponer su caudal electoral.
Con esta decisión, absolutamente inconsulta y ofensiva, el gobierno de la Nación lleva adelante el populismo que siempre criticó, y lo están haciendo de la peor manera, que es desfinanciando a las provincias, los municipios y los jubilados, porque los fondos salen de ANSES.
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